Como todos los años, el miércoles central de Cuaresma es posible encontrarse por las calles, los balcones y los centros educativos con unas tradicionales y entrañables viejecitas parloteando sobre la situación económica y política actual. Son "Les Velles de Serra". Muñecos realizados con ropas viejas y materiales domésticos que se convierten en auténticas críticas a los problemas que envuelven la sociedad del momento. El pasado día 10, fueron 29 monigotes los que salieron a las calles para sorprender a todo aquel que se cruzara por el camino de estas viejecitas y para participar en el vigésimo octavo concurso "Velles de Serra".
Las críticas a la subida de la edad para jubilarse a los 67 años ha triunfado en esta edición y, sobre todo, al ser una medida que afecta directamente a "les velles". De hecho, la representación de una pareja de ancianos incapaces de llevar a su nieto a jugar por no haber cumplido los 67 y tener que ir a trabajar se ha alzado como ganadora este año. Junto a esta sátira, la puesta en marcha de la Televisión Digital Terrestre, TDT, también ha sido objeto de una crítica repleta de originalidad referida al esfuerzo de las familías para comprarse televisiones nuevas. Pero, el Mirador de Elche tampoco se ha quedado a salvo. Unos han reprochado el coste económico y otros lo han criticado por ser pequeño. La gracia y la jocosidad también han estado presentes en representaciones como la de una abuela vestida de buzo tratanto de pescar soluciones para salir de la crisis y rechazando la subida del IVA. El caso Gürtel, la pérdida de los pequeños comercios tradicionales en favor de los grandes almacenes han sido otras de las diversas creaciones de un concurso que ha destacado por su calidad y detallismo.
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